Chus Pato, galardonada con el Premio Nacional de Poesía 2024.

María Jesús Pato Díaz, conocida como Chus Pato, es una de las voces más innovadoras y subversivas de la poesía gallega contemporánea. Nacida en Ourense en 1955, ha desarrollado una trayectoria poética que se caracteriza por su experimentación formal y su compromiso político. Recientemente, ha sido distinguida con el Premio Nacional de Poesía 2024 por su obra Sonora (Xerais), según anunció el jurado del Ministerio de Cultura. Este prestigioso galardón, dotado con 30.000 euros, reconoce el trabajo de un poeta que ha desafiado los límites del género a lo largo de su carrera.

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El jurado destacó Sonora por ser “una obra experimental, una expansiva y concentrada conversación entre el poema y la muerte, aquella que, tras la orfandad de la madre, arrastra a los lectores hacia los abismos del propio linaje. Auténtico fulcro de la poesía gallega, Chus Pato explora nuevas formas de deconstruir y reconstruir los marcos del pensamiento poético tradicional”. Además, subrayaron que el poemario “crea espacios textuales repletos de fugas: retóricas, semánticas, capaces de hibridar distintos códigos en los que se despliega toda su inextinguible potencia sonora. En Sonora , memoria personal, social y política susurran las múltiples voces de una de las más audaces poetas contemporáneas”.

Este premio no es sólo un reconocimiento más en la carrera de Pato, sino una confirmación de su lugar central en la poesía gallega e internacional. Sonora , publicado en 2023, es su duodécimo poemario y representa un nuevo hito en su obra. Traducido al castellano por Gonzalo Hermo, el libro es una reflexión profunda sobre la muerte, el linaje y la memoria, donde la autora despliega todo su potencial experimental. La obra es fiel a su estilo, en el que rechaza el preciosismo y abraza una poesía polifónica y fragmentada, que invita al lector a ser parte activa del proceso poético.

La obra de Pato se distingue por su enfoque crítico y rupturista. Desde sus primeros poemarios como Urania (1991), Heloísa (1994) y Hordas de escritura (2008), una característica destacada en su obra es la renuncia a los signos de puntuación tradicionales y el uso libre del verso. Su poesía fluye de manera continua, y la disposición tipográfica de algunos de sus textos convierte la página en un espacio donde el lenguaje se despliega como en un lienzo, permitiendo que el poema se transforme en un territorio sin fronteras. Este uso del lenguaje evoca la labor de una pintora que dibuja con palabras un universo propio, naciendo desde el vacío.

Para ella, el lenguaje ha sido “arrasado y robado”, y por ello, el poema debe superar el preciosismo y situarse en un nivel casi visceral, cercano al grito. Esta postura la lleva a crear una poesía alejada de cualquier atisbo de esteticismo vacío, comprometida con el rechazo de los discursos patriarcales y dominantes.

El interés de Pato por la fragmentación del yo poético la sitúa en la órbita de la poesía posmoderna, donde la identidad se estalla en múltiples voces. En su poemario A ponte das poldras (1996), introduce el concepto de “Nos-outras” [Nosotras], un yo plural y colectivo que recoge las voces de todas las mujeres que la precedieron, ampliando así el espectro de lo personal hacia lo colectivo y lo histórico. Este “continuum” de voces, que se activa con igual fuerza en su escritura actual, desafía las categorías tradicionales de la identidad poética.

La autora también destaca por su uso de referencias míticas y literarias, muchas veces femeninas, que subvierten las narrativas tradicionales para ofrecerles nuevos destinos. A menudo, opta por una mirada irónica donde imagina los oráculos colgados de pinzas de ropa de plástico, alejando lo mítico de su contexto original para situarlo en un plano cotidiano y desordenado. Este juego con la ironía y la hibridación de géneros es constante en su obra.

A lo largo de su carrera, Pato ha recibido importantes premios, incluido el Premio Nacional de la Crítica en su modalidad de poesía gallega, y su obra ha sido traducida y publicada en numerosos países, entre ellos Argentina, Chile, Portugal, Francia y Bélgica. . Con Sonora , Pato sigue consolidando su lugar en la literatura contemporánea, ampliando las fronteras del lenguaje poético y cuestionando las convenciones de la poesía.

El Premio Nacional de Poesía 2024 sitúa a Chus Pato en una ilustre lista de galardonadas que incluye a poetas como Yolanda Castaño, Miren Agur Meabe y Aurora Luque, y subraya la importancia de su contribución a la poesía gallega y universal.